Algunos os estaréis preguntando por qué hace meses que no actualizo. “Ha muerto” pensarán unos. “Ha dejado el blog, como todo bloguero hace tarde o temprano, o eso dice, para que le adulen un rato”, dirán otros. Pues ni una ni otra; es algo mucho peor: tenemos un podcast, como la mayoría de vosotros ya sabréis y, solo los más atrevidos, habréis escuchado. ¿Y qué? ,diréis .«Mi vecino el del segundo tiene un podcast. Yo tengo un podcast». Aunque no lo parezca, el no actualizar y el tener un podcast son dos conceptos estrechamente relacionados. El duro trabajo al que nos sometemos semana a semana en cuanto a la elaboración de guiones, ensayos generales en los que, literalmente, nos entretenemos con un palo y todo ese tipo de cosas que observaréis (claramente) si escucháis el podcast quita tiempo, es innegable.
¿Que cómo se llama? Pues Normas de equivocación. La originalidad no conoce límites y más en este blog. No pretende ser otro podcast de charla entre colegones en los que, puede que te enteres de cómo le fue a Pepe en aquello discoteca, pero no te importa una mierda. Las risas de fondo por decir la palabra graciosa del grupito de amigos como “pene» (bueno, «pene» SIEMPRE es graciosa) no tienen cabida en nuestro programa, o al menos no pretendemos que la tenga. Queremos hacer algo divertido, que todo el mundo pueda escuchar sin necesidad de ser experto en series, videojuegos o rifles de caza, pero sin caer en el humor casero, y nos referimos con casero al humor entre amigos, no al humor que te prepara tu madre en casa con mucho cariño.
Pretende ser un programa de humor desenfadado, de sketches y de temática variada. No os vamos a hablar solo de series o de cine mientras fumamos en pipa y evaluamos el cine actual siempre comparándolo con la Nouvelle Vague cual críticos de Cahiers du cinéma. Tampoco hablaremos de videojuegos. Hablaremos de todo a la vez (no unos por encima de otros, entiéndase, sino todos estos temas en un mismo programa). Si queréis reíros de nosotros o confirmar la puta mierda que seguro que pensáis que es, lo podéis hacer en www.normasdeequivocacion.blogspot.com (el gemelo malvado de este blog), donde están colgados todos los programas que hay hasta la fecha.
En siguientes episodios de Normas de equivocación (el blog): Batalla en el cielo, esa película en la que los coños son más protagonistas que las propias actrices y las felaciones sirven de elemento narrativo para comenzar y acabar un film que no tiene desperdicio. Llevo meses aplazando su visionado y sustituyéndolo por otras putas mierdas (pero que me hacen sentir mejor). Si le queréis ir echando un ojo a la película para no perderos cuando se comente, haréis mal. Que para algo la voy a comentar y me la voy a tragar yo. No seáis tan imbéciles como quien escribe esto.
¿Os vais a perder una película TAN inteligente?